sábado, 10 de abril de 2010

el mago
Gráficos con escarcha

¿Que es el Tarot?

Antes de comenzar con el estudio de las cartas es importante definir, en primer lugar, que es el Tarot.
El Tarot es un conjunto de 78 cartas llamadas "Arcanos". Cada carta contiene dibujos o figuras de gran simbolismo y colorido. Los Arcanos están divididos en dos grupos: Los Arcanos Mayores compuestos por 22 cartas, las cuales nos dan información determinada sobre algún tema o situación, y los Arcanos Menores conformados por un total de 56 cartas las cuales nos dan más detalles sobre la información o tema consultado. Los Arcanos Menores a su vez están divididos en 4 palos a saber: oros, copas, bastos y espadas. Cada palo representa situaciones específicas de nuestra vida cotidiana. Además, estas situaciones las podemos ver tanto en el pasado, en el presente o en el futuro.

Cada carta contiene imágenes y colores llenas de gran significado. Las imágenes contenidas en las cartas representan arquetipos, de acuerdo con la teoría desarrollada por Carl Jung. Dichos arquetipos son representaciones de nosotros mismos, de nuestra vida, que yacen en la parte más profunda de nuestra psique. De allí que una de las funciones del Tarot es transmitirnos una información desde el subconsciente al consciente. Es decir, el Tarot nos puede revelar todo lo que está oculto en la psique de una persona: temores, situaciones, problemas, entre otros. Por tal razón, el Tarot nos puede ayudar como una herramienta de crecimiento espiritual y personal al revelarnos los secretos más profundos de nuestro ser.

En tal sentido, el Tarot funcionaria como una especie de espejo mágico que conecta dos mundos paralelos entre sí: el mundo de lo real con el mundo subconsciente de aquí la importancia de utilizarlo con responsabilidad y cautela.

El Tarot nos permite en cierto modo ayudar a las personas a encontrar su camino, aclarar dudas y ver las cosas o las situaciones que se está viviendo de una forma más clara. Nos permite además conectarnos con nuestro yo interior, con el interior de nuestro ser. Es por esta razón que debe usarse con cuidado ya que, al tener acceso a la psique o a los sentimientos más profundos de las personas es fácil para quien lee las cartas manipular, si así lo desea, al consultante. De ser así, estaríamos cayendo en el mal uso de esta herramienta de crecimiento espiritual. Por lo tanto, el Tarot no debe usarse con otro fin que no sea ayudar a quien recurre a él. En tal sentido, se debe ser muy objetivo y honesto a la hora de ofrecer una lectura. Se debe saber orientar y canalizar todo ese simbolismo contenido en las cartas de la mejor manera posible.

Así mismo, se debe saber escuchar al consultante y conectarse con él para darle la orientación que esa persona tanto necesita